En esto se consuma la debacle del Sheffield United. El descenso era lo más probable que sucediera después de un inicio de temporada tan flojo, y si a esto le añadimos el mismo rendimiento paupérrimo en la segunda mitad, bueno, no había que ser adivinos para prevenir lo peor. 

Para mí, las principales causas del descenso fueron:

1) El mismo estilo de juego en cada presentación del equipo. Acompañado de un nivel bajísimo de los mismos defensas que la rompieron la temporada anterior.

2) Cero revolución en los cambios. Con esto me refiero a que las variantes que hacía el técnico aportaban poco y nada cuando debían ser requeridos.

3) POCO gol. Los delanteros de esta temporada no son malos futbolistas, la única razón que se me ocurre para su mal rendimiento, es que no se hayan adaptado al estilo de juego y/o a sus compañeros. Pero por favor, eso se corrige con semanas de entrenamiento y en pretemporada.

4) Nefasta gestión de Chris Wilder, que es gran responsable de la segunda razón mencionada. Ya que los fichajes fueron de él, en conjunto con la directiva.

5) El arquero. Bien sabemos que una mala campaña no puede recaer en un solo jugador, pero es evidente la gran diferencia entre Dean Henderson y Aaron Ramsdale. El joven portero ex Bournemouth tiene mucho potencial, pero no está para defender el arco de un equipo Premier.